El día de muertos es una festividad en la que los mundos se conectan, es decir, el mundo espiritual y el mundo terrenal trazan entre sí puentes de comunicación invisibles e incomprensibles que nos invitan a pensar en la posibilidad de que al morir, hay algo más después de la muerte; esto lazos ponen siempre la duda o la certeza de que el cuerpo no está conformado de materia orgánica únicamente, sino que hay algo más en el interior de nosotros. Muchos filosofos religiosos (Cristo, Buda, Mahoma, etc.), poetas y científicos admiten que la muerte es sólo un tránsito, una especie de sueño del cual uno se despierta a una vida superior, muy diferente , incluso, a la que está expuesta nuestra memoria, nuestros ojos y que vivimos cotidianamente, y sólo los relatos mediavales de "los viajes extasicos" ( Lecouteux; 1999) y la tradicion oral sobre los seres venidos de ultratumba nos dan testimonios de dicha "vida". Muchos pueblos tienen la necesidad de refrendar el acto de morir, puesto que un pueblo que no reflexiona y no promueve el acto de morir, es un pueblo que se estanca, no evoluciona, incluso la felicidad y la tristeza no existirían. Sin embargo el acto mismo es silenciado, es transformado en eufemismos que a su vez se convierten en otros creando el tabú, segun la Lingüística. Pero la promoción de la muerte es a tal grado en la sociedad que la Economía y las politicas de estado usan esto para sus fines tanto comerciales como para crear maquinaria de aniquilamiento masivo. La ciencia, que al parecer (de nuestra persepción) es la que menos comprende el acto de morir, tiene su propia definición y - porque no decirlo - cosmovisión, pues para las ciencias naturales como la biologia, la quimica, entre otras, el acto de morir no sólo consiste que los organismos dejen de realizar funciones vitales, sino que es una fuente de aprovechamiento y, sobre todo, un periodo propio de la evolución: la muerte es la evolución misma, los procesos de adaptación y selección están implicitos de alguna manera con el acto de morir. El acto de morir no sólo constituye el hecho de dejar de respirar o de moverse, es un verdadero problema filosofico y científico que se plantea con frecuencia, Heidegger, Camus, Arendt, entre otros; que han intentado resolver ¿qué es la muerte? Y la voz populi pregunta también ¿qué nos depara la muerte? ¿Gusanos? ¿El infierno tan temido o el cielo prometido? ¿La nada?, por otra parte los cientificos podrian preguntar ¿para qupe nos sirve la muerte? ¿Será que en la muerte se encuentra el verdadero vestigio de la evolución y no al nacer?
pero pasemos a la cuestion cultural, dejando de lado esa controvesia por el momento. La celebración de Día de Muertos en México no está alejada de la cosmovisión medieval-occidental, de hecho comparten varias similitudes, pero no por ello haya un completa comprension de los fenomenos de los mundos prehispánico e hispánico; y estas semejanzas son las que dan pie a los sincretismos religiosos es por ello que las ofrendas son el conjunto.
pero pasemos a la cuestion cultural, dejando de lado esa controvesia por el momento. La celebración de Día de Muertos en México no está alejada de la cosmovisión medieval-occidental, de hecho comparten varias similitudes, pero no por ello haya un completa comprension de los fenomenos de los mundos prehispánico e hispánico; y estas semejanzas son las que dan pie a los sincretismos religiosos es por ello que las ofrendas son el conjunto.
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